
En una emotiva ceremonia realizada en la Sala de Sesiones del Congreso Nacional en Paraguay, ante la presencia de autoridades nacionales, representantes del Cuerpo Diplomático y residentes de la comunidad Judía y el público en general se recordó el Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto.
Como anfitrión de la ceremonia habló Arnoldo Wiens, presidente de la Comisión Permanente del Congreso Nacional, la señora Cecilia Ugaz Estrada, coordinadora residente de la Organización de las Naciones Unidas en Asunción habló en representación de la organización, el Cónsul Honorario Designado, Alejandro Rubin Cymerman, habló en representación del Estado de Israel. La señora Ester Stul hija de dos sobrevivientes del holocausto ya fallecidos dio su testimonio sobre las experiencias de sus padres quienes superaron los horrores vividos en su juventud para vivir con alegría y amor por los demás, valorando la vida por sobre todo lo demás.

Palabras de la señora Ester Stul, hija de sobrevivientes del holocausto
Es muy difícil hablar de los seres que amamos sabiendo que soportaron cosas inimaginables, que aunque conozcamos sus historias, no podemos llegar a entender que sintieron nuestros padres, ante semejante horror, no se si la palabra es horror o no existe una palabra que pueda describir lo que paso.
De pronto recuerdo la letra de 2 canciones, la primera de ella dice
Resistiré para seguir viviendo soportare los golpes y jamás me rendiré, y aunque los sueños se me rompan en pedazos, resistiré,
Y realmente resistieron, aunque en ese momento no lo sabían, tenían destinada una tarea para el futuro, esa tarea éramos nosotros, nuestros, hijos, nuestros nietos, tenían que criarnos, educarnos, y darnos todo lo que a ellos les arrancaron, les rompieron en mil pedazos, y nuestros padres, sin familia, sin amor, sin hogar, sin proyectos, con sus cuerpos y sueños rotos, siguieron resistiendo, con su judaísmo intacto, ni el dolor físico, ni las torturas espirituales a las que fueron sometidos, les impidió seguir siendo lo que eran, judíos, una pequeña palabra de 6 letras que nos costo nada menos que 1 millón de seres humanos por letra, y sus almas se unieron a otras almas que eran gitanos homosexuales, negros, discapacitados físicos y mentales y también personas piadosas que extendían su mano para ayudar a los perseguidos.
Parte de la letra de la 2da canción dice:
Porque no es lo mismo que vivir honrar la vida.
Y nuestros padres honraron la vida siempre, tuvieron que renacer de las cenizas, tuvieron que reconstruirse por dentro y por fuera, y armaron sus familias, y honraron la vida, y ahora necesito mencionar a Magda y Samuel, 2 jóvenes sobrevivientes que un día se encontraron, se amaron profundamente, e hicieron su familia de la cual soy integrante junto a mis hermanas Ana y Ruth, y lo que nos enseñaron es justamente lo contrario a lo que ellos vivieron, nos enseñaron la alegría, mi papa nos enseñaba a cantar, adoraba bailar, le encantaba vernos a sus 3 hijas y a su esposa siempre lindas, arregladas, bien vestidas, y mama ,ante cualquier problema que le comentábamos nos decía, no vale la pena que te preocupes, todo se va a arreglar, mira para adelante, Dios cierra una puerta y abre una ventana.
Y mis padres y los padres de algunas personas aquí presentes, no se rindieron, honraron la vida, y creo que sacaron fuerza de los 6 millones de almas que los estaban sosteniendo, de los 6 millones que no sobrevivieron, pero igual vencieron, porque hoy igual que hace mas de 5.000 años AM ISRAEL JAI; EL PUEBLO DE ISRAEL VIVE Y MEDINAT ISRAEL, EL ESTADO DE ISRAEL ES UNA REALIDAD. Gracias
Quiero mandarle un fuerte abrazo a la Sra. Ester Abramovici, y al Sr. y Sra. Gutsztein.